Hace unos años los profesionales del neuromarketing hemos estado diciendo que en pocos años más el mundo del marketing, de la Publicidad y de la Comunicación debía transformarse, abrazar las nuevas herramientas como Neuromarketing, Neuroventas, Neurobranding, Neuroinnovacion y la Psicoantropologia del Consumo entre otras para hacer más científico un sector que está lleno de fracasos enormes, billonarios, la new coke es un ejemplo de ello, el mundo de la publicidad ya está viviendo una fuerte crisis, ser una agencia hoy no es fácil, muchas están quebrando, lo presupuestos en general van a la baja, el descredito de la publicidad está en aumento y esto es simplemente porque no han podido demostrar porque una empresa debe invertir más sin saber cómo esa inversión beneficia a la compañía, hoy mucho se habla del ROI, el súper retorno a la inversión y los medios sociales y digitales han permitido traquear los movimientos del consumidor, dando de alguna forma resultados, pero siempre post inversión, es muy difícil para las agencias poder medir su impacto real en el consumidor final, en mi experiencia trabajando en proyectos con agencias pero nunca en ellas y desde el otro lado con los clientes supervisando su trabajo me he dado cuenta muchas veces del poco sustento que estos tienen, sus “mira yo creo que quizás tal vez esto le pueda gustar a tu cliente”, es increíble, su poco sustento es notable, los publicistas y diseñadores saben en gran medida la importancia de las emociones en un proceso de conexión con un cliente, pero sobre la medición de que emoción y de si esta me sirve para mi objetivo muy poco y esto es un serio problema del sector, porque al final del día todo estimulo presenta una reacción emocional, entonces la pregunta que queda es cuál es la emoción presentada y si esta es positiva o negativa.
Muchos preveíamos que de aquí a 5 años más agencia que no tuviera dentro de sus servicios neuromarketing estaría extinta, pero Nielsen nos sorprendió, dio un golpe a la mesa e hizo una increíble inversión en Consumer Neuroscience, compró una firma de investigación neurocientifica en Boston, pero esta no es la primera vez, en sus inicios también compro a la primera empresa de neuromarketing, Neurofocus, pero esta nueva adquisición marca la tendencia mundial a confiar en estas técnicas, herramientas y tecnologías que buscan entender lo que el cliente no nos puede decir, y no tan solo eso expreso su presidente que Agencia que el 2016 no usa neuromarketing está fuera del negocio, los tiempos han cambiado y es necesario hacer productos y campañas que logren conectar con un cliente, un consumidor y mejor aún una persona cada vez más esquiva, estamos expuestos a más de 9.500 estímulos diarios de publicidad y marketing y nuestro cerebro ya no toma en cuenta aquellos que no le interesa, es por eso que se necesita con urgencia entender el cerebro de las personas, sus motivaciones, emociones y sentimientos más profundos.
Hoy en el mercado latinoamericano ya existen servicios que pueden entregar data importante de seguimiento ocular e impacto emocional de forma remota y con una inversión bastante menor a la de un estudio tradicional, estamos hablando de Neuro Creative Tools, plataforma que puede ser usada por agencias de cualquier tamaño e incluso emprendedores para testear su Marketing, Publicidad y Comunicación con el fin de aumentar la efectividad y conexión emocional con su consumidor final, quien no ha tenido 3 logos y no sabe cuál de ellos realmente le llamara la atención al cliente, bueno, hoy ya es posible saberlo con esta herramienta, o el Emo Research Lab que permite medir el impacto emocional de los discursos de los lideres, ya sean rostros de televisión, políticos, líderes de organizaciones, además de entrenamientos emocionales y de asertividad, el neuromarketing y en general las neurociencias aplicadas darán un golpe de timón a toda nuestra vida, ya basta de creer en nuestra lógica racional de que somos seres pensantes, debemos entender que somos seres sentimentales que racionalizan que es diferente y como Damasio concluyo en su Error de Descartes, no es pienso y luego existo, sino que es siento, existo y después pienso.
Ya para terminar, cuando nos creían locos por decir estas cosas, no veían lo que el mundo estaba haciendo, Coca Cola y P&G tienen laboratorios propios hace años, Google hace lo suyo (aunque pediría que le conecten EEG a usuarios para medir el nivel de estrés de usar sus herramientas porque son bien complejas jajajaja), Facebook no saca ningún cambio en su red social si no lo pasan por EyeTracking (seguimiento ocular) antes, más de la mitad de las Fortune lo usan, en Silicon Valley esta es una herramienta ampliamente validada, aunque no públicamente reconocida, en nuestra experiencia el medir el impacto emocional de entrar, transitar y salir de una tienda de retail para saber la experiencia real ha sido increíble, o el entender los recorridos reales en los supermercados midiendo los puntos de interés para cambiar la estrategia de distribución y aumentar las compras por ticket, el medir los impactos neurobiometricos y emocionales de lo spot y saber cuáles funcionaran y cuáles no, ahorrando millones a las marcas, aumentando su efectividad es gratificante, ahora como último punto, si alguno aun duda de la veracidad y efectividad, cerrare diciendo que esta herramienta no la creo el mundo privado, sino la Academia hace ya décadas, con Harvard como punta de Lanza, con una Universidad de Berckley fundando Neurofocus, con universidades del mundo entero invirtiendo en esto, en Chile está el BNI de la Universidad de Chile que tiene 1 laboratorio enfocado a negocios y empresas, la Universidad Católica con sus laboratorios de Neuropsicología, la USACH con su laboratorio de Neuromanagement, la Universidad Diego Portales con su centro de Neuroeconomia, esto no es moda, es una tendencia real y efectiva, que por supuesto atrae el levantamiento de gente que habla del tema sin fundamento científico, académico o investigativo.
Y tú, ¿qué esperas para entender el Cerebro de tu consumidor?